14 enero 2011

Intento n. 1

El día comienza cuando las ventanas se abren.
Nunca al revés.

Llegan los pies descalzos,
Caminan despacio,
Esparciendo cansancio.

Las manos deshacen,
con fastidio y hastío
los nudos del pelo.

Los ojos,
buscan la calma,
y sólo encuentran
rayos de luz que recorren la casa.

Los labios se abren.
aun hinchados:


...Gritos en la cocina...


La cafetera está vacía.
En el paquete no queda café.
En el molinillo sólo dos granos.
Solitarios y tristes.
Piden clemencia.


...Gritos en la cocina...